Morena, tu sonrisa es un sol danzante,
tus ojos brillan como un mar infinito,
cada paso tuyo es pura esperanza,
y la vida se curva cuando estás cerca de mí.
Tu cabello es una noche de terciopelo,
tu manera es ritmo, es canción, es luz de luna,
cada gesto tuyo es dulce y profundo,
hace que mi corazón lata sin control.
Morena, tu risa es un río de alegría,
tu abrazo es refugio, es luz que me guía,
y en las sombras o a la luz del día,
siento que tu perfume me enseña a amar.
Cuando pasas, todo se ilumina,
la ciudad entera parece cantar,
y yo, perdida en tu divina belleza,
aprenso el significado de simplemente mirar.
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